Las bebidas con alcohol son muy comunes en nuestra vida diaria, en nuestras salidas y en nuestros momentos de relajación. Estas bebidas son aquellas que contienen alguna cantidad de etanol. Se pueden agrupar en vinos, cervezas, licores, aguardientes o whiskies.
El aporte calórico del alcohol es de 7 kilocalorías por gramo, pero ¿por qué se consideran calorías vacías? Porque no
aportan ningún nutriente, proteínas, hidratos de carbono, grasas, minerales ni
vitaminas, de forma que su almacenamiento es mucho más fácil.
Sin embargo, ¿Por qué se recomienda el consumo de vino durante las comidas? Debido a la alta cantidad de polifenoles el vino, un consumo moderado diario previene la aparición de enfermedades cardiovasculares, de forma que aunque aumente ligeramente el aporte calórico de la comida posee grandes beneficios para nuestra salud.
A pesar de ello, es frecuente ingerir cantidades excesivas de alcohol que no provoca estos beneficios, sino que puede llegar a provocar depresión, descoordinación, malabsorción de nutrientes y en casos extremos cirrosis y problemas cardiacos. Por ello, los niños, embarazadas y enfermos no deben ingerir bebidas alcohólicas.
CERVEZA
La cerveza es una de las bebidas más consumidas
tanto en España como a nivel mundial. Un referente para la hidratación en días
de verano y que toma cada vez más importancia en el mundo del deporte. Sin
embargo, ¿con
alcohol o sin alcohol?
Podemos ver como 200
ml de cerveza sin alcohol aporta 33 calorías menos que derivan principalmente de los hidratos de carbono (85%), ya que solo
el 0.3% es alcohol. Sin embargo, la cerveza con alcohol no solo aporta esas
calorías más, sino que éstas derivan de hidratos de carbono (30%) y sobre todo
del alcohol (66%). Este hecho
hace que al consumir la cerveza sin alcohol (energía procedente de hidratos de
carbono) podamos consumirla con ejercicio físico pero por el contrario, si
consumimos cerveza con alcohol (energía procedente del alcohol) su quema va a
suponer un esfuerzo más costoso.
Pero no solo nos
vamos a centrar en las calorías y la procedencia de éstas, sino también en la
cantidad de vitaminas y minerales que ésta aporta.
Debido a la diferencia en la preparación de cada tipo de cerveza tendrá una
composición de vitaminas y minerales diferente. Por ejemplo, podemos observar
como la cerveza sin alcohol es rica en potasio, fósforo y ácido fólico y la cerveza con
alcohol posee mayor contenido en fósforo, menor en potasio y ácido fólico.
Por ello, cuando nos apetezca tomar
una cerveza, elijamos la cerveza sin alcohol, ya que posee menos calorías que
son más fáciles de quemar y además posee un contenido mayor de vitaminas y
minerales.
¿Y la cerveza 0´0?
Tras conocer el aporte nutricional y alcohólico de
la cerveza con y sin alcohol aparece la duda de la cerveza 0´0. Aunque sea
conocida la cerveza sin alcohol la realidad es que posee un 1% de alcohol con
una graduación de 0.4 a 0.6%, por lo que se ha intentado fabricar una cerveza
con los mismos ingredientes pero sin nada de alcohol.
Mientras que hemos dicho que la cerveza sin alcohol
tiene alrededor de unas 50 Kcal, la cerveza 0´0 posee alrededor de 20 Kcal.
También posee un ligero aumento de vitaminas y minerales.
Ahora, veamos el
aporte calórico de otras bebidas alcohólicas.
¿Y cuando lo mezclamos con otras bebidas?
Por todo ello, debemos de tener un poco de
conciencia al ingerir alcohol, evitando los excesos y cuidando su aporte
calórico.
- Debemos intentar tomar las bebidas coadyuvantes light o zero, de
forma de la ingesta de calorías no resulte excesiva.
- Evitar los licores y las bebidas con alta graduación de alcohol
y en medida de lo posible, cualquier bebida que posea alcohol.
- Ya hemos visto que la elección de una cerveza sin alcohol es
mucho más inteligente que pedirla con alcohol, ya que será más fácil de quemar
y más difícil de almacenar.
Guadalupe Cordero Fernández
alvida.es
alvida.es